Vivimos un momento donde la transición a los coches eléctricos es el camino para seguir creciendo y prosperando en una sociedad ecosostenible. Los coches eléctricos tienen varios beneficios, como un menor impacto al no emitir gases ambientales de escape nocivos, costos de mantenimiento más bajos debido a tener menos piezas móviles y no requieren cambios de aceite ni mantenimiento del sistema de escape.
Gracias al innovador comparador gratuito de Fundación Renovables se puede hacer una aproximación de cuanto te puedes ahorrar al pasarte a un automóvil eléctrico. Esta nueva herramienta permite informar a los futuros compradores sobre los beneficios de utilizar una movilidad sostenible.
El manejo de este nuevo proyecto es sencillo e intuitivo. Una vez dentro de la página web se debe indicar el tipo de vehículo –puede ser muy variado desde un coche hasta un autobús e, incluso, una motocicleta–, se especifica el kilometraje anual y después el comparador te mostrará una comparación de coste y vida útil.
Se puede también distinguir por función de su inversión inicial costes de mantenimiento y de combustible. Los usuarios que disponen de un sistema de autoconsumo eléctrico en su hogar, además pueden elegir la opción de definir el porcentaje de carga del vehículo que se realizará mediante este sistema.
En esta herramienta se ha llevado a cabo un análisis comparativo de las distintas opciones de combustibles (electricidad de autoconsumo, electricidad de la red, híbridos, gasolina y diésel) para coches particulares, motocicletas, furgonetas, autobuses y camiones, teniendo en cuenta la duración total de su vida útil. Para cada tipo de vehículo se han examinado los costos relacionados con el combustible, el mantenimiento y la inversión inicial de compra, tanto por separado como en su conjunto.
Hay que seguir apostando por un uso que tenga como prioridad la reducción de emisiones de gases de efecto invernadero y la mejora de la calidad del aire en las ciudades. Por ese motivo, el uso de vehículos eléctricos es el futuro a tener en cuenta. La transición hacia modelos más sostenibles tiene que ser la preferencia de las ciudades para seguir protegiendo nuestro medio ambiente.
